Este tipo de licencia otorga el derecho a utilizar una tipografía digital en aplicaciones de escritorio, como puede ser el software de diseño gráfico o los procesadores de texto. Permite instalar la fuente localmente en un ordenador u otro dispositivo electrónico, de manera que sea accesible en cualquier aplicación que soporte el formato de la fuente instalada. Escritorio (Desktop) es el término más utilizado para definir este tipo de licencia, pero también encontramos otros nombres como Impresión, Básica, Offline o Trabajo Creativo.
3a. Escritorio
Uno de los factores que hacen de este un tema especialmente complejo es la variedad de criterios que definen el uso de las fuentes. Se ofrecen licencias con distintos precios según unas unidades de medida especifícas. Sus valores marcan la cobertura y el coste de la licencia tipográfica, definiendo las limitaciones de uso y una escala de precios. La licencia de Escritorio es la que tiene un mayor consenso en cuanto a las unidades que miden el uso tipográfico. Tan solo encontramos 3 métricas diferentes y todas ellas están relacionadas con el número potencial de personas que usarán la fuente.